Intro

Este es el blog de la exposición colectiva de pintura organizada por la Feria de Arte Contemporáneo que se celebrará en el Museo de Historia de Arévalo.

Entre el 26 de abril y el 26 de mayo mostraremos en la sala de exposiciones temporales del Museo Arevalorum la exposición colectiva titulada "¿Pintura? ¡Pintura!".

¿Pintura?¡Pintura! surge para dar cabida a los proyectos pictóricos recibidos en la convocatoria de la VIII Feria de Arte Contemporáneo de Arévalo que por su alta calidad merecen exponerse en una sede distinta a la principal del evento.

En este blog puedes informarte sobre los artistas y sus obras.

Contexto de la exposición

El término “pintura pintura” nace en la década de 1980 para definir algunas de las corrientes estéticas surgidas en torno a esa fecha y que tienen en común una vuelta al soporte y la técnica pictóricos, dejando a un lado las tendencias más experimentales de los 20 años previos. Para una mejor comprensión del origen de la llamada pintura pintura quizá sea conveniente repasar brevemente la evolución de las artes plásticas y visuales en el convulso siglo XX .
Durante las primeras décadas del pasado siglo las llamadas vanguardias históricas experimentaron con el arte transformándolo para siempre. Algunos movimientos como el expresionismo, el cubismo o el futurismo siguieron utilizando la pintura como medio de expresión pero a la vez incorporaron un lenguaje totalmente transgresor, otras vanguardias como el neoplasticismo o el constructivismo inventaron formas de abstracción y otras como el dadaísmo y el surrealismo fueron incluso más allá al utilizar todas las técnicas a su alcance.

Tras la Segunda Guerra Mundial aparecen las neovanguardias, es decir, nuevas vanguardias pero inspiradas de una u otra manera en las anteriores. En la década de los 60 y parte de la siguiente, la postura de los artistas se vuelve más arriesgada, cada vez se crean obras con medios aparentemente más simples pero que intentan expresar conceptos más complejos. Primero, el minimalismo y, posteriormente, el arte povera y el arte conceptual colocan a la idea y el concepto en el lugar preferente de la creación artística, más allá del resultado final. En esta época comienzan a utilizarse nuevos materiales y técnicas, como la fotografía o el vídeo, que ocupan el lugar preferente que hasta entonces había tenido la pintura. Estos medios sirven a los artistas conceptuales para documentar performances y acciones artísticas efímeras como el Land art o el Body art.

A finales de la década de los 70 se aprecia un cierto agotamiento de este tipo de tendencias y vuelve el interés por la pintura, deudora, en su mayoría, de la que se practicaba en las vanguardias de comienzos de siglo, pero también de movimientos más recientes como el Pop art. En varios lugares del planeta surgen focos muy activos de jóvenes pintores: en Italia un grupo conocido como la “Transvanguardia”, en Alemania los “Nuevos salvajes” y en Nueva York los graffiteros, que cambiaron el metro por las galerías de arte.

Comienza a hablarse de muchos “neos”: neoexpresionismo, neopop, neogeo… fruto de un movimiento mucho mayor conocido como “Posmodernidad”, un término complejo cuya característica principal, posiblemente, sea la utilización libre de formas de las vanguardias, en particular, y la cultura e historia del arte, en general, muchas veces de una forma descarada, irónica o paródica.

España no fue impermeable a todo esto, además en este caso se unieron las tendencias internacionales con las características específicas de nuestro país; la muerte de Franco aún era un hecho reciente, por lo que la sociedad estaba en pleno cambio y, tras 40 años de censura, había hambre de modernidad y libertad creadora. Un grupo de artistas, con Miquel Barceló a la cabeza, unido a la inauguración de museos, como el Reina Sofía en Madrid y el IVAM en Valencia, pusieron de nuevo a España en el mapa internacional del arte.

Por todo el país comienzan a aparecer artistas, galerías y ferias; y en este contexto el pintor José Antonio Arribas organiza la Bienal de Arévalo, uno de los temas de la conferencia que se ofrecerá en el Museo.

Durante ésta década el mercado del arte aumenta considerablemente, pero a comienzos de los 90, debido a la Guerra del Golfo y a la escasez de petróleo derivada de la contienda, se produce una recesión económica que afecta a todos los sectores, también al del arte, que, mientras tanto, está desviando de nuevo su atención hacia otros medios en detrimento de la pintura.

Actualmente se puede decir que todos los medios y soportes conviven en cierta igualdad y que unos han “contaminado” a otros, es decir, la pintura que, décadas antes, había introducido elementos de la fotografía o la escultura, recientemente se encuentra relacionada con las llamadas “instalaciones”, es decir, la apropiación de un espacio tridimensional de dimensiones variables con materiales y técnicas heterogéneos. En ocasiones se ha hablado de “pintura expandida” para definir esta situación, que se concreta en traspasar los límites físicos del cuadro y continuar la obra por las paredes, el suelo o, incluso, el techo, ya sea con pintura o bien con objetos, fotografías o proyecciones de vídeo.

La situación actual de la pintura se debate entre los artistas que siguen esta línea, los que tratan de reformular de una manera personal los lenguajes pictóricos preexistentes, sobretodo los aparecidos en las vanguardias y neovanguardias y una tercera vía nacida al calor de las nuevas tecnologías y el arte digital. Pero en cualquier caso creo que se puede decir que la pintura goza de buena salud a pesar de tener ya miles de años de historia, ya que aunque ha variado mucho sigue conservando sus rasgos distintivos (color, forma, composición, superficie) y sigue sirviendo como medio de expresión y transmisión de conocimientos.